Herencia Colombia: analizan modelo para financiar la conservación de la naturaleza en el largo plazo
- Detalles sobre el enfoque, alcance e implementación del Proyecto de Financiamiento para la Permanencia, en particular, del caso Herencia Colombia (HECO), que busca asegurar la conservación de la naturaleza a largo plazo, fueron compartidos y analizados durante un seminario organizado por el Centro de Estudios Públicos (CEP) y WWF (World Wildlife Fund) Chile el pasado miércoles 2 de octubre.
La instancia, denominada “Fondo para la biodiversidad: la experiencia de Colombia”, tuvo como expositora principal a Sandra Valenzuela, directora de WWF Colombia -uno de los socios fundadores de HECO-, y contó con la participación de la coordinadora de Finanzas y Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda, Carola Moreno, y de la ex ministra de Medio Ambiente de Chile, y presidenta del Fondo Naturaleza Chile, Carolina Schmidt. La actividad fue moderada por Sylvia Eyzaguirre, investigadora senior del CEP.
En su presentación, Sandra Valenzuela compartió aspectos generales de HECO, que es un programa público-privado liderado por el Gobierno de Colombia, surgido en el marco de la COP21, realizada en París en 2015
Según indicó la directora de WWF Colombia, un primer paso fue revisar otros modelos ya en curso a nivel mundial, como el de Bután, Arpa para la Vida en Brasil y Perú, Great Bear en Canadá y Costa Rica por Siempre. La implementación formal de HECO se inició en 2022, teniendo como objetivo asegurar la conservación y financiación a largo plazo de 32 millones de hectáreas, que representan el 16% del territorio colombiano, promoviendo la consolidación del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SINAP) y contribuyendo a la visión 2020-2030 del país. Lo anterior, basado en un modelo financiero de apalancamiento de recursos públicos y privados para las áreas protegidas y que ya asegura US$245 millones, con el compromiso del Gobierno de garantizar la sostenibilidad a largo plazo.
Miradas desde Chile
Sobre HECO, Carola Moreno destacó la forma en que fue estructurada esta iniciativa, con bases muy sólidas desde el punto de vista técnico en cuanto a identificar los objetivos que se quieren financiar, poder costear las medidas y establecer las distintas etapas de implementación. “Todo eso va dando certezas a quienes pueden y quieren contribuir en este tipo de Fondos. Estamos hablando de problemas que son intergeneracionales y muchas veces no preocuparnos de proteger la biodiversidad puede ser irreversible y por lo tanto poder señalizarlo de una forma cuantificada, ya sea por el valor económico que tiene desde el punto de vista del uso de los recursos de un ecosistema, o por los servicios ecosistémicos que nos provee la naturaleza, poder transmitir eso y poder cuantificarlo invita a que haya distintos tipos de instituciones, ya sean internacionales, donantes, privados, estados, que quieran participar”, comentó.
Asimismo, destacó que a nivel nacional el Fondo Naturaleza Chile “ha hecho un trabajo muy en línea con esto, un esfuerzo importante por tener esta línea de financiamiento fiscal a través de la glosa del Ministerio del Medio Ambiente y un trabajo bien impresionante de poder levantar donaciones y financiamiento de empresas privadas”.
Destacó que la agenda de trabajo de la Oficina de Finanzas Sostenibles del Ministerio incluye de manera transversal los aspectos relativos a biodiversidad, y comparte la mirada de largo plazo requerida en el diseño de una nueva Estrategia Financiera que incorpore medidas para biodiversidad haciéndose cargo del entendimiento global que ya no puede desacoplarse de lo climático; el desarrollo de herramientas como una Taxonomía que entregue transparencia al mercado y permita alinear financiamiento hacia actividades medioambientalmente sostenibles que entre otras cosas contribuya con objetivos que incluyan biodiversidad; en el fortalecimiento del rol del Ministerio ante del Fondo Verde del Clima para facilitar la canalización de recursos hacia proyectos chilenos, sentando las bases para una institucionalidad que habilite un plan de trabajo de mediano a largo plazo; en los esfuerzos coordinados interministerialmente para incorporar enfoques de capital natural en la política pública y las decisiones de inversión pública y privada, como base de un desarrollo sostenible.
La exministra Carolina Schmidt valoró la experiencia presentada sobre el modelo colombiano y destacó que en Chile se avanza también en la búsqueda de financiamiento permanente para las áreas protegidas. Al respecto, subrayó la continuidad institucional que se ha dado en las últimas décadas, retomando el ejemplo del Fondo Naturaleza Chile, que avanzó en su concreción a través de diversos gobiernos.
“El ejemplo de Colombia, pero también lo muestran el caso de Brasil, es que cuando tienes una alianza público-privado con una gobernanza público-privada, eso le da estabilidad en el tiempo a los proyectos y no depende de la voluntad del Gobierno de turno”, remarcó Sylvia Eyzaguirre, indicando además que la conservación y los temas medioambientales han sido desde el inicio del CEP una preocupación permanente.