Hacienda lanzó la Estructura de la Taxonomía de Actividades Económicas Medioambientalmente Sostenibles para Chile
- La finalidad de este documento es servir como marco para la construcción de una taxonomía o clasificación estándar, ampliamente validada, para identificar actividades medioambientalmente sostenibles y fomentar la inversión en ellas.
- El ministro de Hacienda destacó que "una taxonomía de estas características será un bien público, que viene a llenar un vacío, y responde a una demanda urgente del sector financiero, inversionistas y diversos actores económicos que ven en esta herramienta un pilar fundamental para su operación y decisiones estratégicas, incluyendo la gestión de riesgos".
- La subsecretaria Heidi Berner destacó que "así como Chile reconoce desde hace décadas el valor de la responsabilidad fiscal, ahora corresponde conocer el valor de la responsabilidad con el medio ambiente. Desde Hacienda nos comprometimos a liderar el desarrollo de un sistema de clasificación que pueda guiar nuestra economía hacia un futuro más verde".
Más de 100 personas del mundo financiero, empresarial, de la sociedad, especialistas en sostenibilidad y diversas autoridades asistieron al lanzamiento del documento "Construyendo un lenguaje común para la sostenibilidad: Estructura de la Taxonomía de Actividades Económicas Medioambientalmente Sostenibles para Chile", que consolida el trabajo realizado por el Ministerio de Hacienda desde 2021 con la colaboración del Banco Central, la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), la Superintendencia de Pensiones y el Ministerio del Medio Ambiente, sobre la base de las mejores prácticas de la experiencia internacional. Este proyecto ha contado con el apoyo y asesoría técnica del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Climate Bonds Initiative (CBI). En las etapas siguientes colaborarán el Banco de Desarrollo Latinoamericano (CAF) y la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusamme-narbeit (GIZ).
En la apertura, y de forma virtual, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, enfatizó que este trabajo no comienza desde cero, ya que en particular la Unión Europea ha sido la base para el desarrollo de más de 35 proyectos de taxonomía en el mundo. Destacó que una taxonomía de estas características será un bien público, que viene a llenar un vacío, y responde a una demanda urgente del sector financiero, inversionistas y diversos actores económicos que ven en esta herramienta un pilar fundamental para su operación y decisiones estratégicas, incluyendo la gestión de riesgos. Agregó que "la taxonomía sostenible no determina una lista de actividades en las que se debe invertir de manera obligatoria ni un mecanismo de regulación per se. Una taxonomía es, por definición, un sistema de clasificación que no implica obligaciones vinculantes para las empresas. Algunas empresas incluso pueden adoptarla voluntariamente para guiar sus políticas y estrategias".
Por su parte, la subsecretaria Heidi Berner enfatizó el compromiso del Ministerio de Hacienda con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente, en línea con el rol que le mandata la Ley Marco de Cambio Climático: "Hemos trabajado por casi dos años desde que la iniciativa de desarrollar una hoja de ruta para elaborar una taxonomía nacional surgió en la Mesa Público-Privada de Finanzas Verdes que lidera nuestra cartera. Durante 2022 realizamos un intenso trabajo colaborativo con los otros organismos públicos miembros de dicha mesa y el Ministerio de Medioambiente, finalizando en esta etapa con la estructura de la clasificación".
Recordó que a nivel global pocos sectores de la economía operan hoy con cero emisiones netas: "Nuestro país debe ser parte del esfuerzo por hacer más y mejor. Así como Chile reconoce desde hace décadas el valor de la responsabilidad fiscal, ahora corresponde reconocer el valor de la responsabilidad con el medio ambiente. Desde el Ministerio de Hacienda nos comprometimos a liderar el desarrollo de un sistema de clasificación que pueda guiar nuestra economía hacia un futuro más verde. Este compromiso nos ha llevado a elaborar el documento que hoy nos congrega". Agregó que este Ministerio "busca potenciar medidas para impulsar el crecimiento como, por ejemplo, algunas de las contempladas en el Pacto Fiscal. Particularmente, este tipo de herramienta podría incentivar la inversión de empresas en investigación y desarrollo sustentable, la diversificación productiva y el cumplimiento de metas en cuanto a desarrollo de proyectos en minería limpia, energías renovables e hidrógeno verde."
La presentación del documento con la estructura de la taxonomía para Chile estuvo a cargo de María Paz Gutiérrez, de la Oficina de Finanzas Verdes del Ministerio de Hacienda, quien detalló que el documento establece el marco de la taxonomía, lenguaje común con un criterio estandarizado a nivel nacional para que inversionistas, financistas y empresarios puedan identificar de forma objetiva y creíble las actividades económicas medioambientalmente sostenibles. La propuesta se basa en cinco elementos estructurales, para elaborar una taxonomía que vele por la interoperabilidad con las de otras jurisdicciones, sin descuidar su adecuación al contexto local.
La publicación de la estructura de la taxonomía es un primer hito, seguido de un trabajo que deberá involucrar a un amplio grupo de actores del sector privado, la academia, otras entidades del sector público y organizaciones de la sociedad civil, dentro de una gobernanza clara, con roles y responsabilidades bien definidos. Consolidar esta gobernanza será un desafío en sí mismo. El Ministerio de Hacienda cumplirá con el rol directivo, asesorado por entidades y expertos nacionales e internacionales, incluyendo al sector privado. Además, existirá un nivel coordinador y técnico. Este último será en encargado de proponer los criterios técnicos de selección, y por ende, los umbrales para determinar la contribución que una actividad económica realiza a uno o más objetivos de la taxonomía -por ejemplo, objetivos de mitigación y adaptación.
Un ejemplo concreto de los beneficios de contar con esta clasificación para Chile −que ha sido líder mundial en la emisión de bonos soberanos ASG (Ambiental, Social, Gobernanza)− será la identificación de actividades que puedan asociarse a la emisión de bonos verdes, ampliando la actual base de proyectos elegibles. En el caso de los bonos vinculados a sostenibilidad (SLB), disminuirá el riesgo de gatillar un incremento en el costo financiero de estos instrumentos por incumplimiento de las metas asociadas. Esto debido a que la taxonomía local permitirá acelerar la transición hacia el cumplimiento de los objetivos climáticos.
Carola Moreno, coordinadora de Finanzas y Asuntos Internacionales, cerró el evento destacando el carácter flexible que debe tener la taxonomía, reconociendo que en el tiempo deberá adaptarse a cambios tecnológicos, prioridades medioambientales, adopción de nuevos objetivos y actividades económicas, entre otros aspectos. Y que el desarrollo de la taxonomía para Chile deberá ser un trabajo permanente, que requiere de la contribución de todas las partes. Agradeció especialmente a Mercedes García Farina, policy lead the UNEPFI, quien en forma telemátiva expuso sobre el marco de taxonomias para América Latina y el Caribe -LAC Taxonomy Common Framework.
En la actividad, realizada en el aula magna de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile, intervinieron también Solange Berstein, presidenta de la CMF; María Florencia Attademo-Hirt, gerenta general del Departamento de Países del Cono Sur del BID y representante en Chile; José De Gregorio, decano de la FEN; y Nicholas Kennedy, Deputy Head of Mission de la Embajada Británica en Chile.